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jeudi 22 janvier 2015

Los luteranos finlandeses celebran San Enrique en Roma: el Papa anima a dar testimonio juntos

«Católicos y luteranos pueden hacer mucho juntos para dar testimonio de la misericordia divina en la sociedad», exhortó el Papa Francisco exhortó a los miembros de la Delegación Ecuménica de Finlandia, a quienes recibió en audiencia este jueves 22 de enero en el Vaticano.

En su mensaje el Santo Padre manifestó su alegría y les dio la bienvenida en ocasión de su peregrinación ecuménica anual a Roma para celebrar la fiesta de San Enrique, patrono de este país. Resaltando que: “el evento de este año se ha revelado como un verdadero encuentro espiritual y ecuménico entre católicos y luteranos”.


Recordando las palabras de San Juan Pablo II, a los miembros de la primera delegación ecuménica finlandesa, llegados a Roma hace treinta años atrás; el Pontífice afirmó que: “el hecho de estar en Roma es ya un testimonio de la importancia de los esfuerzos por la unidad. El hecho de que ustedes rezan juntos es un testimonio de su fe que solo por la gracia de Dios se podrá alcanzar la unidad. El hecho que ustedes reciten juntos el Credo es un testimonio de la única fe común de todo el cristianismo”.


Su visita, señaló el Papa, se da en el marco de la Semana de Oración por la Unidad de los cristianos. Este año dijo Francisco, “nuestra reflexión se centra en las palabras de Jesús a la Samaritana en el pozo: Dame de beber (Jn 4,7). Así, nos recordamos que la fuente de toda gracia es el Señor y que sus dones transforman a aquellos que lo reciben, haciéndolos testigos de la vida verdadera que proviene sólo de Cristo”. En este sentido, dijo el Sucesor de Pedro, “católicos y luteranos pueden hacer mucho juntos para dar testimonio de la misericordia divina en nuestra sociedad”. “Un testimonio cristiano compartido es particularmente necesario ante la desconfianza, la inseguridad, las persecuciones y los sufrimientos que experimentan tantas personas en el mundo de hoy”, agregó el Papa.


Señalando la importancia de los pasos dados hasta ahora, en vista de la unidad, resaltó que estas iniciativas están sostenidas por el progreso en el diálogo teológico entre las Iglesia. Muestra de ello es la Declaración conjunta sobre la doctrina de la justificación, firmada hace quince años entre la Federación Mundial Luterana y la Iglesia Católica.


Esto, dijo el Obispo de Roma, puede continuar produciendo frutos de reconciliación y de colaboración en Finlandia y Suecia, con el deseo que otras convergencias puedan surgir de este diálogo sobre el concepto de Iglesia, como signo e instrumento de la salvación donada por Jesucristo.


Antes de concluir sus saludos, el Papa Francisco exhortó a la Delegación Finlandesa a: “fortalecer las relaciones ecuménicas entre luteranos y católicos en Finlandia e invocó al Señor, para que envíe su Espíritu de verdad y nos guie a una mayor caridad y unidad”.



La Santa Sede confirma que el Papa no tiene previsto visitar España en 2015 pese al año teresiano

En un comunicado la Secretaría de Estado de la Santa Sede ha hecho llegar a Mons. Ricardo Blázquez, Presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) una carta en la que se comunica que “no está prevista la visita del Papa Francisco a España durante el 2015”.

Este comunicado también señala que el Pontífice “sigue muy de cerca las celebraciones que, con tanta ilusión, se han programado para conmemorar el V Centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús y ruega a Dios para que se produzcan abundantes frutos de vida cristiana en nuestro país”.


La nota de la Secretaría de Estado de la Santa Sede ha sido remitida por la Conferencia Episcopal Española y en ella se explica que “el Papa Francisco está realizando sus viajes siguiendo su propósito de acercarse a las periferias geográficas y existenciales, y tiene previsto para este 2015 numerosos viajes, además del ya realizado a Asia (Sri Lanka y Filipinas) dos más al continente americano, en concreto a Estados Unidos y a Ecuador, Bolivia y Paraguay y otro a África en donde visitará Uganda y República Centroafricana”.


De esta manera el comunicado afirma que “los obispos españoles confían en que el Santo Padre pueda visitar nuestro país más adelante “.


Aunque la nota no lo dice, otro factor que puede haber influido para que el Papa no visite España en 2015 es que se trata de un año lleno de citas electorales: autonómicas y municipales en mayo, catalanas en septiembres y fin de legislatura en noviembre (a finales de año podría haber elecciones generales) y el Papa no quiere interferir en estos procesos.



Borrador CUANDO SACERDOTES Y HEBREOS COMPARTÍAN EL MISMO ALIMENTO

"L´Osservatore Romano" del 20-21 de enero.

Anna Foa es una firma recurrente del periódico de la Santa Sede. Enseña historia moderna en la Universidad de Roma La Sapienza.


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de


Los estudios de los últimos años están poniendo cada vez más de relieve el papel general de protección que la Iglesia ha tenido respecto a los judíos durante la ocupación nazi de Italia. Desde Florencia, con el cardenal Dalla Costa proclamado “Justo” en 2012, a Génova con don Francesco Repetto, también el “Justo”, pasando por Milán con el cardinal Schuster hasta llegar, naturalmente, a Roma donde la presencia del Vaticano, además de la existencia de zonas extraterritoriales, permitió salvar a miles de judíos.


Precisamente, a propósito de Roma, las modalidades con las que se llevó a cabo la obra de asilo y salvamento de los perseguidos eran tales que no podía ser el fruto solamente de iniciativas que provenían desde abajo, sino que claramente estaban coordinadas, además de permitidas, por los vértices de la Iglesia.


Se borra así la imagen propuesta en los años sesenta de un Papa Pio XII indiferente a la suerte de los hebreos o, incluso, cómplice de los nazis.


Me gustaría resaltar aquí que esta imagen más reciente de la ayuda prestada a los judíos por la Iglesia no surge de posiciones ideológicas afines al catolicismo, sino sobre todo de investigaciones concretas acerca de la vida de los judíos durante la ocupación, la reconstrucción de historias de familias o de individuos. En resumen, del trabajo de campo.


El refugio en las iglesias y en los conventos surge continuamente en las narraciones de los supervivientes, recorre como un hilo rojo los testimonios orales recogidos durante años en Italia – como la amplísima documentación de los testimonios de judíos italianos en la Shoah Foundation – y está presente en la mayor parte de las memorias de los contemporáneos. Está contado como un hecho seguro que pertenece al ámbito de las evidencias, con toda la diversidad de situaciones: desde los conventos que solicitaban un hospedaje, a los que acogían gratis a los hebreos los cuales, a su vez, daban una mano en el trabajo cotidiano, como es el caso de las chicas hebreas que ayudaban ejerciendo de maestras de los niños de la escuela de las Pias Maestras Filipinas en Roma Ostiense, caso contado por Rosa Di Veroli.


Es, en resumen, una imagen fruto no del debate sobre el tema Iglesia y Shoah, sino también, y sobre todo, de la investigación dirigida a ilustrar la vida y el recorrido de los hebreos bajo la ocupación nazi.


La debatida "quaestio" historiográfica sobre Pio XII y los hebreos ha frenado la investigación durante muchos decenios, desplazando al terreno ideológico cada intento de aclarar los hechos históricos. Pienso, en cambio, que para escribir la historia de la relación de la Iglesia con los hebreos en la Italia ocupada es necesario, ante todo, despejar el campo de esta cuestión.


La pregunta principal, por tanto, no puede ser la de la relación entre el espíritu profético de un Papa y los compromisos diplomáticos de otro Papa, sino sobre cuánto y hasta qué punto y, también, con cuántas oposiciones internas la Iglesia y el Papa estuvieron dirigiendo la obra de salvamento de los hebreos italianos. Las dos cuestiones son distintas y, en mi opinión, tienen que seguir siendo distintas.


La investigación sobre las modalidades concretas de ayuda a los hebreos, sobre la presencia de los hebreos en conventos y en iglesias, sobre la vida de los hebreos dentro de los refugios eclesiásticos, empieza a sacar a la luz un aspecto sobre el que me parece se ha reflexionado poco hasta ahora: el cambio de mentalidad que de ello puede derivarse.


Es verdad que hebreos y cristianos habían convivido durante siglos, entre los muros de los guetos y en las antiguas juderías, en Italia y de manera particular en Roma, pero esta convivencia muy raramente había implicado a los eclesiásticos. Ahora, necesario por la urgencia de la persecución, sacerdotes y hebreos compartían el mismo alimento. Las mujeres hebreas paseaban por los pasillos de los conventos de clausura y los hebreos aprendían el Padre Nuestro y se vestían con el hábito talar como precaución en el caso de irrupciones alemanas y fascistas. Rosa Di Veroli, a la que se pidió que rezara con los otros en la iglesia, lo hacía, pero recitando en voz baja el Shemà Israel.


¿Había una efectiva esperanza por parte de los cristianos de tocar el corazón endurecido de los hebreos y empujarlos al bautismo? Y los hebreos que se bautizaron, ¿lo hicieron tras solicitarlo verdaderamente o por la fascinación de un mundo que no conocían y que les ofrecía protección? Viene a nuestra mente la Lia Levi de "Una bambina e basta" (“Una niña y nada más”), atraída durante un breve instante por el bautismo.


Hablamos obviamente de los casos de conversión en los conventos, no de esas conversiones, verdaderas o simuladas, realizadas en 1938 con la esperanza de evitar la dureza de las leyes racistas, cuando en Milán el cardenal Schuster bautizaba al alba a los hebreos en el Duomo y los periódicos antisemitas más radicales veían en esos bautismos “el caballo de Troya de los hebreos en la sociedad aria y cristiana”.


Ciertamente, todo esto pone en marcha en ambas partes dudas y temores ante una relación estrecha y cotidiana.


En los sacerdotes, y sobre todo en las religiosas, estos temores pueden tomar el camino del impulso hacia la conversión, según una línea más consolidada y tradicional de relación. De este modo, la cotidianidad y la atención encuentran justificación y consuelo en la esperanza de llevar a un hebreo al bautismo.


En cambio, en los hebreos el temor atávico a ser empujados a la conversión les lleva a veces (surgen casos de este tipo en la documentación oral) a no tomar ni siquiera en consideración la idea de refugiarse en una institución eclesiástica.


Pero puede suceder que nada de todo esto se realice. ¿Qué decir, en Roma, de la Iglesia de San Benedicto, en el Gasómetro, dónde se refugiaron muchos hebreos y de su párroco don Giovanni Gregorini, entonces jovencísimo, que encontraba el tiempo para charlar cada día con uno de los refugiados hebreos, un hombre de una cierta edad y muy religioso, de las respectivas religiones y de sus relaciones? Aquí, por ambas parte, había un respeto recíproco y curiosidad mutua.


En resumen, creo que esta familiaridad nueva y repentina, iniciada sin preparación por las circunstancias, en condiciones en las que una de las dos partes era perseguida y peligraba su vida y necesitaba, por tanto, de mayor “caridad cristiana”, no se dio sin consecuencias para el inicio y la acogida del diálogo. Un diálogo que llegó mucho más tarde, ciertamente, y que se inició sobre todo a nivel teórico, mientras éste se nos muestra como un diálogo desde abajo, hecho de compartir los alimentos juntos y de conversaciones sin pretensiones, también para superar la ansiedad de una relación desconocida hasta ese momento.


Las religiosas de otro convento romano añadían el tocino a la sopa común sólo después de haberla distribuido a las hebreas a las que habían dado refugio. También ésta es, en mi opinión, una forma de diálogo desde abajo.


Inmediatamente después de la guerra, en un momento en que prevalecía la necesidad de olvidar la Shoah, este proceso de diálogo fue en parte bloqueado porque por un lado los hebreos estaban intentando reconstruir su proprio mundo y la propia identidad después de la catástrofe y, por el otro, los católicos parecían haber vuelto a las posiciones tradicionales en las que la esperanza de la conversión era más fuerte que el respeto.


Tal vez es este cierre de los primeros años después de la Shoah lo que impidió el desarrollo de ese diálogo desde abajo, lo mismo que el de niveles más altos, como demuestra el fracaso del encuentro de Jules Isaac con Pio XII.


De todas formas, fuera como fuese, a principios de los años sesenta, con "El vicario" de Hochhuth, sobre este proceso se proyectaría la sombra de la leyenda negra de Pio XII, con el resultado de obstaculizar y oscurecer la memoria y el peso de ese primer recorrido común.


Hoy es el momento justo para volver a investigar sobre él.



Jesuita de Fe y Alegría


Tomado de varias agencias.


"El misionero jesuita Antonio Bach, que nació en Madrid hace 80 años y ha desarrollado toda su labor en Perú educando a los niños pobres, falleció el pasado 17 de enero en Lima, tras 62 años en la Compañía de Jesús y 48 de sacerdocio. Desde hace algunos años sufría dolencias cardíacas.


El padre Bach era muy conocido por muchos jesuitas de la provincia de España y especialmente por todos los que han hecho la campaña Fe y Alegría en Perú desde 1967.


Antonio Bach nació en Madrid el 13 de noviembre de 1936 en el seno de una familia catalana. En 1952 ingresó en el noviciado de la Provincia de Toledo en Aranjuez y finalizó esta etapa de formación en Miraflores.


Tras hacer dos años de magisterio, estudió teología en San Cugat del Vallés (Barcelona) y se ordenó de sacerdote en Madrid en 1966. En 1968 regresó a Perú, y, desde entonces, ha estado destinado en Fe y Alegría --cuyo objetivo fundamental es la educación de calidad de los pobres--, donde ha sido director nacional hasta 1988, secretario general y coordinador internacional desde 1990 hasta 1995.


Fe y Alegría se ha convertido con Bach, según indica la Compañía de Jesús, en "el gran referente de la educación popular en el Perú". Concretamente, destaca su dedicación en las construcciones de los colegios, los viajes continuos por todo el país, su dedicación a las órdenes de religiosas y su amor por los niños.


Desde la Compañía de Jesús le recuerdan como "un gran compañero" que tenía "un excelente y fino humor" y como "un hombre entregado sin reservas".


En una carta enviada por el padre Bach al director de Obras Misionales Pontificias (OMP) en España, Anastasio Gil, el sacerdote cuenta su testimonio de vida como sacerdote y educador en una misión en la que aseguraba que era "muy feliz".


"Fe y Alegría me ha enseñado que en un despacho podía realizar plenamente el ideal de trabajar con los pobres y la educación y realizarme como sacerdote. Este es mi primer testimonio: la administración tiene un sentido de Evangelio. En FA me he realizado plenamente como sacerdote con la pastoral que yo había soñado".


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Lean, amigos, mi último Tratado titulado


La Religión de la Comunicación incomunicada en España


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Tomás de la Torre Lendínez



La Suma Teológica en un año


Me acaba de llegar una propuesta: leer la Suma Teológica de Santo Tomás en un año.

La propuesta parte de un profesor estadounidense, T. J. Burdick, a través de su web FreeTheology y parece sencilla. Lo que ha hecho es, simplemente, dividir la Suma en 365 partes que te van enviando a tu email cada día, para que así no te olvides. Al cabo de un año has acabado de leer la Suma, con todo el provecho que ello comporta.


Ah, ¡y es gratis!


Quien esté interesado puede inscribirse aquí.


La traducción de la Suma que usa está, evidentemente, en inglés.


¿Para cuando una iniciativa así en castellano?




Un psicólogo comenta en una web terapias para dejar la homosexualidad y le inhabilitan por 3 meses

Ejerce como psicólogo desde hace treinta años. Está especializado en psicoterapia cognitiva del comportamiento, tiene siete especializaciones universitarias y tres masters, ha escrito ensayos y ha impartido clases de la materia a la que ha dedicado toda su vida.

Pero según la Junta del Colegio de Psicólogos de Lombardía (norte de Italia) habría lagunas en sus conocimientos científicos, tan graves que le hacen merecedor de una condena a tres meses de suspensión.


Apenas se formalice el acto no podrá trabajar y tendrá que cancelar de todas las páginas web la publicidad de su estudio.


La víctima de esta medida es Paolo Zucconi, de 64 años, casado, dos hijos, nacido en Udine pero con el estudio en Milán, en el barrio de Loreto.


¿Su culpa? Haber osado responder el 19 de julio de 2013, en la página web ´guida psicologi.it´, a un visitante que había preguntado, no se sabe si ingenuamente, «¿Es posible dejar de ser homosexual?».


Zucconi articula su respuesta citando los protocolos de la terapia cognitivo-comportamental utilizada desde hace tiempo con éxito en los Estados Unidos, pero también en Europa, y explica que «cuando una persona nota un evidente malestar en su comportamiento sexual», es posible recurrir a estas terapias.


Un colega napolitano pidió inmediatamente su rectificación y lo denunció al Colegio de Psicólogos. Los psicólogos de Lombardia presentaron la denuncia y después de un ´proceso deontológico´ que se llevó a cabo en Milán el pasado 11 de diciembre le anunciaron el castigo: tres meses sin trabajar.


Zucconi relata que durante el proceso, ante quince de sus colegas, sintió una gran hostilidad ideológica: «Todo parecía ya organizado de antemano. Fui sometido a un largo interrogatorio, todo él basado en la eficacia de las denominadas ´terapias reparativas´. Yo me limité a citar la literatura científica sobre el tema, pero afirmé que no he tenido nunca ocasión de experimentar su eficacia. Ciertamente, admití que si un paciente me pidiera ayuda, examinaría el caso y no me negaría a ayudarlo».


Probablemente, dice, es la frase que causó la sanción. ´Suspendido´.


La unanimidad del pensamiento único, cuando se habla de identidad sexual, no acepta discusiones. El terapeuta que se desvía, aunque sólo sea en línea de principio, es criminalizado y sancionado.



Riccardo Bettiga, presidente del organismo censor


El presidente del Colegio de Psicólogos de Lombardia, Riccardo Bettiga, rechaza sin embargo cualquier intención persecutoria y sostiene que todo se ha desarrollado de manera regular. Se niega a entrar en mérito del caso - aún en itinere y por tanto, según él, todavía bajo secreto - y explica que el juicio estuvo limitado a los aspectos deontológicos de la profesión. Y, en relación a las terapias reparativas, confirma cuanto está declarado en la página web profesional, es decir, que «el Colegio de Psicólogos de Lombardia defiende la libertad de los terapeutas de explorar sin posiciones prejudiciales la orientación sexual de los propios clientes, señalando que cualquier corriente psicoterapeutica cuyo objetivo sea condicionar a los propios clientes hacia la heterosexualidad o la homosexualidad es contraria a la deontologia profesional».


Intachable, cuando se trata de ´condicionar´. ¿Pero y si es el propio paciente el que pide ayuda? ¿Y si declara vivir con malestar la propia esfera identitaria y quiere verificar las posibilidades de eliminar el origen del problema? En este caso, ¿serían lícitas las ´terapias reparativas´?


Preguntas que parecen estar destinadas a permanecer sin respuesta, porque la cuestión no gusta, es embarazosa, políticamente incorrecta. El especialista que afronta el tema corre el riesgo de acabar siendo investigado.


A este propósito es necesario recordar que ya en el pasado, al menos en dos casos, el Colegio de Psicólogos de Lombardia tomó medidas disciplinarias contra terapeutas que acogían a pacientes que vivían mal la propia homosexualidad.


Otro procedimiento de este tipo está en marcha en el Colegio de Psicólogos de Toscana. Y es bien conocido el fuego cruzado que se desencadenó en 2008 contra Tonino Cantelmi, presidente de los psiquiatras católicos por haber sostenido la oportunidad de afrontar desde el punto de vista terapéutico el ´malestar homosexual´.

También en aquel caso el lobby supo moverse de manera inmediata y compacta, con todo el armamento deontológico – e ideológico – del caso.


Porque toda la cuestión, según cuanto refieren los especialistas que se han ocupado del tema, parece fundarse sobre un equívoco enorme. La ´terapia reparativa´ no pretende de ninguna manera ´reparar´ la homosexualidad, como fingen creer los extremistas de la sexualidad alegre y feliz; sino ocuparse en cambio de ´reparar´ la herida originaria en la relación con el padre que, según algunos estudiosos, estaría en el origen de los trastornos de la identidad sexual.


¿Tesis discutible? Muy bien, pues que se discuta entonces, que se abran los debates, que se dé la palabra a los defensores de una u otra posición.


En cambio, en 2010, una deliberación de la orden nacional de los psicólogos [italianos] prohibió sic et simpliciter recurrir a la ´terapia reparativa´, con un silogismo que – según no pocos psicólogos – traza una premisa y llega a dictar una conclusión apodíctica sin demostrar nada.


Cuando se trata de la subjetividad de la psique – observan los especialistas – no puede existir un ´pensamiento único´ y es necesario preguntarse al mismo tiempo a qué cientificidad se hace referencia cuando se habla de ciencia humanas.


¿Cómo se puede hablar de cientificidad en campo psicológico, por ejemplo, cuando hay no pocos médicos que se niegan a considerar ´científica´ la psicoterapia?Preguntas legítimas frente a unas medidas disciplinarias como las infligidas a Paolo Zucconi.


Pero también con referencia al debate, totalmente ideológico, que se ha desencadenado con ocasión del congreso sobre la familia promovido por la Región [de Lombardia, ndt].


El caso del psicólogo ´castigado´ tal vez nos ayude a comprender mejor cuál es el ´pensamiento único´ que sopla sobre el fuego de ciertas cuestiones pretendiendo imponer una visión sobre la que se prohíbe discutir, so pena de acabar en el banco de los acusados.


(Traducción de Helena Faccia Serrano, Alcalá de Henares)



«Lo tenía todo, pero era un profundo desgraciado porque me faltaba lo más importante, que es Dios»

El programa Cambio de agujas, que presenta Cristina Casado en H.M. Televisión, entrevistó recientemente al periodista y escritor José María Zavala, quien a finales de 2014 publicó, en compañía de su esposa, Paloma Fernández, Un juego de amor. El Padre Pío en nuestro camino al matrimonio (LibrosLibres), obra que recoge, entre otros aspectos de su vida, su conversión, en la cual jugó un papel decisivo San Pío de Pietrelcina, a quien Zavala consagró uno de sus mayores éxitos editoriales: Padre Pío , de la que acaba de salir la décima edición en español (más de 30.000 ejemplares vendidos) al mismo tiempo que la segunda edición brasileña y la primera en Eslovaquia (la obra había sido traducida ya al italiano, al portugués y al croata).

Abajo ofrecemos la entrevista en su integridad (ver el vídeo), de la cual destacamos algunas frases:


-"Yo, que no soy una persona de lágrima fácil, empecé a llorar. Rompí a llorar, mejor dicho. Durante horas enteras estuve llorando, hasta el punto de que llegó a formarse un pocito con mis lágrimas en el suelo".


-"Estuve 15 años sin pisar un confesonario. Lo tenía todo materialmente: un buen puesto de trabajo, un buen coche, un buen sueldo, una buena casa. Pero aquel día me di cuenta de que era un profundo desgraciado porque me faltaba lo más importante, que es Dios".


-"Mi padre ofreció su vida por Juan Pablo II en año 81, cuando fue el atentado. Nosotros nos enteramos por su director espiritual, que era un sacerdote del Opus Dei y nos lo dijo".


-"Mi madre esa última noche que yo pasé con ella, me dijo: ´Hijo mío, vete a tu casa, que estás agotado´. Y entonces, yo me arrojé en brazos de mi madre llorando como un niño y le dije: ´Mamá, lo único que te pido es que cuando estés allá arriba te acuerdes de mí´. Y mi madre me dijo, muy serenamente –ella era una persona muy fuerte-: ´Sí, me acordaré de ti, pero tienes que intentarlo´. Se refería a que tenía que poner en marcha mi proceso de nulidad, como así hice".


-"Cuando murió mi madre, como decía, estuve unos meses sumido en la desesperanza, unos meses en los que estuve, no en el abismo, pero sí al borde del abismo. Entonces iba al Retiro a que me echaran las cartas del tarot. Estuve merodeando por el Retiro y ahora sé que, gracias a que el Señor me preservó, no logré localizar el monumento al ángel caído del Retiro. Sentía la necesidad de hacer un pacto con el diablo porque consideraba que estaba solo en la vida, sin ningún asidero, pese a que tenía todo, es decir, no me faltaba materialmente de nada. Pero me faltaba Dios, por supuesto, que es el Amor con mayúscula. Y bueno, fue todo providencial, porque después de tres meses en los que podía haber acabado quitándome la vida, irrumpió Paloma en mi vida".



-"Cuando menos te lo esperas, de la forma que menos te lo esperas, el Señor irrumpe en tu vida a través del Padre Pío... Como decía Vittorio Messori, el periodista italiano: ´El Padre Pío es un meteorito del Medievo en pleno siglo XX´. Bueno, yo ahora añado que en pleno siglo XXI porque sigue trabajando, y cómo trabaja. Centenares de conversiones a través del libro Padre Pío . Es un instrumento suyo. Yo he escrito más de 30 libros, pero para mí, los libros que cuentan de verdad son los libros que yo no considero míos. Son el libro del Padre Pío , el de Así se vence al demonio y este libro que ahora hemos escrito Paloma y yo, Un juego de amor . No hay nada más grande que sentirte instrumento -aunque miserable- del Señor para hacer bien a mucha gente... Pero estamos viendo, estamos recibiendo correos, infinidad de correos, en esa dirección que damos al final del libro (unjuegodeamor@gmail.com), de matrimonios que están felizmente casados pero no valoran lo suficiente el tesoro de su matrimonio sacramental, de su matrimonio. De separados, de divorciados, de personas y matrimonios jóvenes con hijos, que estaban en trámites de separación y que, tras leer el libro, han decidido darse otra oportunidad

Ahora es cuando realmente entiendo todo el sufrimiento que Paloma y yo hemos pasado -este verano ha sido tremendo- para que esto diera fruto".